Antes todo esto era Campo
¡Hombre Campo! Tenía yo ganas de hablar contigo, ven aquí. Mira que llevo tiempo pensando sobre el asunto, pero nunca he encontrado la oportunidad, así que aprovecho para preguntártelo con honestidad: ¿Qué te ha pasado?, ¡tú antes molabas! últimamente andas de capa caída, ya no eres el mismo de antes. ¡Campo, el dignificador del brutalismo español! Que ha sucedido con ese tipo ¿eh? el señor al que llevo años admirando se está convirtiendo delante de mis narices en un creador de figurillas, que no se da cuenta de que se queda atrás porque en vez de ir mirando al frente, va mirándose el ombligo.