Manifiesto
Hoy tenemos la ilusión de compartir con vosotros el Manifiesto, que recoge la filosofía con la que viaja esta revista, y la que nos ha llevado a muchos de nosotros a cometer muchas locuras, por este amor peligroso que es la arquitectura.
MANIFIESTO
La arquitectura es más antigua que la profesión del arquitecto. La arquitectura es expresión de pueblos, gentes y culturas. Es inherente al ser humano. Es indisoluble del arte. La arquitectura da cobijo, calor, hace feliz o desgraciado a quien la habita. La arquitectura es una necesidad humana, y el arquitecto tiene las herramientas para construir ese servicio a la sociedad. La arquitectura habla, presume ante los ojos externos, oculta tras las cortinas una forma de vida. La arquitectura tiene rostro, tiene personalidad, tiene miedos, sueños, tiene tabúes. La arquitectura tiene vida, y necesita ser habitada para tener sentido. La arquitectura necesita al hombre, y el hombre, necesita una arquitectura humanista.